martes, 11 de febrero de 2014

Copenhague-Malmo-Amsterdam

Este ha sido nuestro último viaje, y ha sido en Copenhague donde ha surgido la idea de realizar este blog.

Podemos decir que éste ha sido un viaje de última hora, pero eso no es nada raro en nosotros, ya que siempre nos decidimos un poco tarde. Pero esta vez creo que hemos batido el record, nos decidimos cinco días antes de salir. Para nosotros los viajes empiezan cuando empezamos a pensar en posibles destinos, empezamos a buscar información, leer blog de viajes, ver programas de viajes.......

Nuestra primera idea era Ámsterdam, pero ya habíamos estado en la ciudad hace doce años, así que pensamos en la posibilidad de combinarlo con algo más, y buscando entre varias posibilidades nos decidimos por Copenhague. Pero claro, al ver información sobre esta ciudad danesa, vimos la posibilidad de visitar un tercer país, Suecia. Ya que Malmo se encuentra a tan solo media hora de tren de Copenhague. Así q finalmente nos decidimos por la siguiente ruta Dinamarca-Suecia-Países Bajos



COPENHAGUE-CIUDAD DE TORRES Y VELAS

02-02-14

Por la mañana nos dirigimos al aeropuerto de Barajas. En esta ocasión hemos decidido ir en autobús. Para ello cogemos el cercanías a Atocha y allí cogemos un bus que directamente nos lleva al aeropuerto. El billete es de 5 euros por persona.

Nos deja justo en la puerta de la terminal 1 que es de la que salimos. Por primera vez vamos a volar con una compañía que tiene buenos precios "Norwegian". Hay que destacar que con esta compañía dispones de wifi gratis en el avión.

En unas tres horas llegamos al aeropuerto de Copenhague. Mientras esperamos la salida de las maletas vemos que hay máquinas para sacar el billete de tren a la estación central. Así que una vez tenemos el equipaje nos ponemos en marcha para buscar el tren. Hay que indicar que una vez sacas el ticket, no tienes que validarlo en ningún sitio, en todo caso te lo puede pedir el revisor. La estación central está a tan solo 3 paradas.

 




Lo que si hay que tener en cuenta es que en Dinamarca la moneda oficial es la corona danesa. Nosotros nos hicimos la cuenta redondeando un poco, de forma que 1 euro son 7 coronas.

El hotel nos lo buscamos cerquita de la estación. Es una buena ubicación, ya que es una ciudad en la que perfectamente vas de un sitio a otro andando. Nosotros elegimos el hotel Axel Guldsmedem. Se trata de un hotel ecológico.




Una vez instalados toca patear la ciudad. Aquí también se estila lo de desplazarse en bicicleta. Al dirigirnos hacia el centro lo primero que nos encontramos junto a la estación es el Parque Tivoli. Es un pequeño parque de atracciones muy querido por los daneses por tratarse de un clásico de la ciudad.

 
 Y a pocos pasos de aquí entramos en el centro de la ciudad, y lo primero que nos sorprende es que estamos en la ciudad elegida para celebrar la gala de eurovisión de este año 2014. Ni que decir tiene que en estos países este certamen se vive mucho más que en España.



Nos encontramos en la plaza el Ayuntamiento, el cual cuenta con uno de los que dicen es el reloj mas bonito del mundo. Del mismo modo llama la atención una escultura de un toro derrotando a un dragón, la estatua de los guerreros vikingos o la de Hans Christian Andersen autor del popular cuento de la sirenita.



























Y a partir de aquí ya nos adentramos en las calles comerciales del centro de la ciudad, calles peatonales en su mayoría y llenas de gente en los horarios comerciales, de 10:00 a 18:00. Paseando por aquí nos encontramos algunos canales, no tanto como en Ámsterdam y por estas calles nos damos cuenta de la cantidad de torres que hay en esta ciudad, a cual más original.





























Estas son solo unas de las pocas que se pueden ver en éste lugar. Ya hemos desvelado el por qué hemos dicho que ésta era una ciudad de torres. Lo de las velas es porque cualquier sitio donde vayas está decorado con velas, hotel, tienda, restaurantes.... Todo tiene un rinconcito decorado con la luz de las velas.

Mi sensación sobre este ciudad es que se trata de un sitio calmado y ordenado. Un lugar con rincones para descubrir y donde poder disfrutar del conocido diseño Danés.






Continuando por sus calles nos encontramos con la iglesia de mármol. Una fastuosa cúpula se erige entre calles estrechas con edificios bajos.



Al otro lado de la calle tenemos una gran explanada donde se encuentra el palacio real, formado por varios edificios independientes y en cada uno vive algún miembro de la familia. Cuando la bandera está ondeando significa que se encuentran en palacio.





Y al otro lado del agua nos encontramos con un edificio impresionantemente iluminado, el edificio de la nueva ópera, inaugurado en 2005.



Pero si hay algo que no podemos dejar pasar en Copenhague, es la sirenita. Se trata de una pequeña escultura sobre una piedra. En distintos foros la gente comenta que se decepcionaron al verla porque se esperaban una estatua de mayor tamaño. En nuestro caso, como ya íbamos con esa idea de que sería pequeña, no nos pareció tan poca cosa. Al parecer esta estatua ha sido víctima de numerosos actos vandálicos, pintadas, le han puesto ropa, le han arrancado de la piedra, le han cortado los senos... Pero a pesar de todo, ahí sigue y cada día es fotografiada por cientos de turistas que llegan hasta ella a través de un paseo por un parque en el que se puede disfrutar de obras de la mitología así como de una antigua fortaleza militar conocida como Kastellet.








Es una ciudad cómoda para visitar, moderna a la vez que clásica. En la que hablando un poco de inglés no vas a tener problemas para entender o hacerte entender. En cuanto a lugares donde comer pues poco podemos decir, las comidas las hemos hecho en cadenas de hamburguesería que todos conocemos y para la cena hemos hecho la compra en una cadena de supermercados. Por cierto, en esta cadena había muchos productos de origen español como chorizos, gazpacho,......

Pero nos falta algo más que es curioso de visitar, y es que dentro de esta ciudad nos encontramos con un estado aparte la ciudad libre de Christiania. Se trata de un barrio parcialmente autogobernado y donde hay unos 850 residentes. El estado no suministra ni luz ni agua y se rigen por sus propias normas.



No podemos dejar pasar la ocasión de visitar una tienda de Lego, ya que Dinamarca es el país de origen de estos juguetes de construcción.


Pues estas son solos unas pinceladas de esta ciudad, en mi opinión poco conocida y que merece la pena visitar. La ciudad de las torres y las velas.









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